Llegan las primeras nevadas y en Huesca podemos encontrar algunas de las mejores pistas de esquí de España. Con este tiempo, las estaciones de esquí se convierten en el destino preferido de cualquier fin de semana o día de fiesta.
Hay varias pistas de esquí en Huesca para los diferentes amantes de los deportes de invierno, como son el esquí y el snowboard. La principal recomendación si coges tu coche, viajar en horas menos transitables para evitar caravanas y disfrutar del paisaje.
Panticosa es la primera estación de esquí que te encontraras tras pasar Biescas. Pero la estación de Panticosa no solo una estación para profesionales, sus 35 kilómetros de estación están equipadas para que los menos experimentados y niños puedan disfrutar. El hecho de que esta estación esté situada en el pueblo de Panticosa, facilita pasar unos días allí mientras te alojas en sus hoteles o casas rurales. Además, puedes visitar el puedo y hacer alguna compra en sus tiendas deporte de nieve. A pocos kilómetros, te encontraras una de las zonas más relajantes, el Balneario de Panticosa.
Un par de kilómetros más al norte, llegarás a otra de las estaciones de Huesca, Formigal. También, en el Valle de Tena y que comparte grandes similitudes con Panticosa. La Estación de Formigal está dentro del mismo pueblo que cuenta con hoteles, casas rurales y viviendas o chalets que puedes alquilar para disfrutar de la temporada de invierno. Puedes visitar la Iglesia Románica que conservan desde el siglo XI, pero principalmente es un pueblo dedicado al turismo de nieve y al turismo rural. Panticosa y Formigal cuentan con una línea de autobús, el Bus Blanco, que nos acerca a sus pistas y facilita la llegada de nuevos turistas.
Por el contrario puedes preferir la estación de Astún y Candanchú tras pasar por la Estación de Canfranc, punto recomendado de visitar por su historia. Esta vieja estación de tren, sirvió durante años para conectar Francia y España.
Una de las grandes diferencias de Astún y Candanchú, es que son propiamente dos estaciones de esquí. Junto a ellas, se construyeron todo tipo de complejos hoteleros o comercios, para que los visitantes pudieran disfrutar de la nieve y poder alquilar o comprar equipos de deporte.
Seguramente, los más expertos prefieran estaciones de esquí como Astún y Candanchú; mientras que Panticosa y Formigal son lugares más familiares. Indiferentemente, en todas ellas se puede disfrutar de la nieve en invierno y en verano de paisajes y deportes de aventura.