Puedes haber caminado junto a víctimas si has viajado por los Países Bajos, Méjico, Tailandia, Camerún, Australia o cualquier otra parte del mundo.
Cada año, son 4 millones de personas las que caen en la red del crimen transnacional y organizado. De ellas, el 10% son niños. Las víctimas de la trata con motivos de explotación sexual están más cerca de lo que parece cuando viajas por una zona de “turbulencias” turísticas. ¿Cómo reconocerlas? ¿Cómo ayudarlas? Aquí tienes unos consejos.
¿Como reconocer a una víctima?
A menudo, las víctimas de la trata con motivos de explotación sexual son confundidas con prostitutas. Sin embargo, el 80% de las personas que ejercen una actividad de prostitución en el mundo lo hacen bajo el control de un proxeneta. Primero, las engañaron con una oferta de trabajo, fueron vendidas o secuestradas, luego trasladadas, violadas, golpeadas, tal vez drogadas y obligadas a pasar hambre… hasta que dócilmente han acabado por dar servicios sexuales a los clientes.
Una víctima de la trata no es libre de sus idas y vueltas. A menudo, está explotada sexualmente en un lugar cerrado: bares, salones de masaje privados. Vive bajo la obligación de pagar su deuda – una suma estimada por los traficantes para rentabilizar “sus inversiones”. Excepto casos de trata interna, una víctima habla poco en el idioma local. Generalmente, duerme en el lugar donde la explotan sexualmente y no tiene posibilidad presentar sus papeles de identidad – que le robaron los traficantes. Una víctima desconfía de cualquiera. Todos la traicionan (traficantes, clientes charlatanes o descontentos, policías corruptos, allegados) y sabe que las reprasalias pueden conducirla hasta la muerte.
¿Como ayudar a una victima?
Cada situación es diferente: olvida cualquier intento de ayudar de inmediato la víctima o acercarte al traficante; por varias razones: primero, por tu propia seguridad, después por la de las víctimas y su familia. La policíal local a veces está alineada con los traficantes, por eso, no son las primeras personas a las que contactar en absoluto. Lo mejor es dirigirse a asociaciones locales de ayuda a las víctimas. La gente de la asociación conoce bien la problemática, identifica contactos serios dentro de las fuerzas de policia y puede ayudar víctimas al salir del infierno en el que están después de la esclavitud sexual. Para conocer las asociaciones que actúan en los lugares que visitan, pueden informarse en la organización humanitaria internacional S.T.O.P. – Stop Trafficking Of People, que le indicara como actuar de la manera más eficaz possible. Existen personas como Elodie, que desde esta asociación, puede ayudarte. Contacto: elodie.broussard@stopinternational.org